Regalo de atardecer

He vuelto a la rutina después de que miércoles y jueves me fuera del todo imposible cumplir con la planificación.
Hoy es viernes, por lo tanto, toca............. La Mola. Es la primera vez en los más de 7 años que Merijou y yo decidimos tomar el mismo camino, que subimos a la Mola juntos los dos solos (que bonita experiencia).

Nada mas arrancar, he notado como una ligera falta de costumbre a estas caminatas, pero rápidamente me he vuelto aclimatar y hemos cogido un muy buen ritmo de subida.

Esta vez, junto con el lastre en los tobillos, he intentado sobretodo en los tramos de mayor inclinación, alargar al máximo mi zancada, obligando a tener que ejercer aun más la musculatura de los cuadriceps y gemélos.

La tarde se ha ido cerrando y al final gracias de los frontales...

2 comentarios:

Magín dijo...

Joder, que mania tiene la gente con ir a caminar, pues no será mejor coger un taxi?
saludos

Nico dijo...

Magic... ya sabes, cuando quieras solo tienes que decírmelo y hacemos una caminata de estas!!! Oye que ya subo hasta sin oxígeno ehhhhhhhhh... Si me viera el "Mingote" estaría incluso orgulloso de mí (jejejejeje)

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